La Trassierra o Trasierra de
Córdoba, está situada al oeste de la capital cordobesa, enclavada en una zona
serrana muy próxima al P.N. de la Sierra de Hornachuelos. Toda esta zona, está
plagada de carreteras serpenteantes que suben y bajan, siguiendo la fisionomía
caprichosa de esta bella sierra llena de bosques. Además, a lo largo de esta
ruta podremos conocer dos de los monumentos más emblemáticos de la provincia de
Córdoba: por un lado el castillo de Almodóvar del Río, y por el otro, la mítica
ciudad de Medina-Azahara. Dos lugares, que sin duda te harán disfrutar de la
visita.
Comenzamos nuestra ruta poniendo rumbo hacia la localidad
de Palma del Río, para visitar su casco histórico, en el que encontraremos interesantes edificios, tanto de carácter religioso, como de carácter civil, ,encontrando conventos, iglesias, palacios,...,dentro del conjunto formado por las murallas que rodeaban la zona, y donde podemos encontrar unos jardines de interés entre dichas murallas. En el antiguo pósito, encontrarás la oficina de turismo para obtener información sobre horarios, siendo necesario que contactes con la página web del Palacio de los Portacarrero, si quieres concertar una visita. Volviendo al río, podemos cruzarlo por el viejo puente de hierro para visitar la ermita de Belén, desde donde encontraremos una buenas vistas de la localidad.
Tras la visita a Palma del Río, seguiremos nuestro camino hacia Almodóvar de Río. Nosotros, lo haremos
por la A-341, que antiguamente era la vía principal para unir las capitales de
Sevilla y Córdoba. Prácticamente, rodaremos desde Palma del Río hasta Almodóvar
con el río Guadalquivir a nuestra derecha, y aunque no lo veamos, sentiremos su
presencia por el frescor de los campos de un verde intenso casi todo el año, y
las plantaciones de naranjas que circundan la carretera. En nuestro itinerario, pasaremos junto a las verjas del Palacio de Moratalla. Para concertar su visita tendrás que ponerte en contacto con la empresa Córdobaviva. Pasada la localidad de
Posadas, ya podremos ver frente a nosotros, sobre la colina, la silueta del
imponente castillo de Almodóvar. D. Rafael Desmaissieres y Farina, IX Marqués de la Motilla y XII Conde de Torralva, fue el impulsor de la restauración que se llevaría a cabo en esta fortaleza que comenzó a ser construida allá por el año 740. El acceso al castillo se hace por una imponente cuesta que te llevará al aparcamiento situado a los pies de la Torre del Homenaje y a la torre de la Escuela, que es una torre albarrana de amplias dimensiones unida al edificio principal, por medio de un arco de medio punto. Su forma es rectangular, posee garitones en las esquinas y está rematada con almenas piramidales. Por el precio de 5€ podremos
recorrer prácticamente todo el castillo, desde el patio de armas,
pasando por las almenas, la torre del homenaje,
hasta las mazmorras. Si no nos apetece entrar al castillo, no importa,
porque las vistas que ofrece el camino que recorre su perímetro, ya merecen la
pena, contemplando las extensas llanuras, y el paso del río Guadalquivir bajo
sus torres.
Al bajar del castillo continuaremos
por la travesía que tendremos justo delante nuestro, y no la dejaremos hasta
que volvamos a enlazar con la carretera que traíamos desde Palma del Río.
Continuando dirección Córdoba pasaremos por la localidad de Villarrubia, donde la carretera se
desdobla, pero su velocidad está limitada en muchos casos a 70 km/h, a causa de
los frecuentes cruces, incorporaciones y semáforos. Así que tómalo con calma.
Al recorrer
un par de kilómetros y pasar un par de semáforos, deberías ir poniéndote en el
carril de la izquierda, puesto que el desvío hacia Medina-Azahara sale desde
ese carril. Cuando atravieses la autovía entrarás en una carretera estrecha que
en un principio tiene el asfalto en malas condiciones. Al llegar a la primera
rotonda encontrarás el aparcamiento y el Centro de Visitantes de esta mítica
ciudad musulmana, donde podrás contemplar de forma gratuita, una gran muestra
de elementos encontrados en la “gran ciudad musulmana”. En el aparcamiento
deberás tomar un autobús que te dejará en las mismas puertas de Medina Azahara,
ya que hoy día está prohibido ir con los vehículos particulares.
Medina Azahara fue levantada por orden del
califa cordobés Abd al-Rahman III en el siglo X, entre los años 936 y 976, en
el Monte de la Novia
o Chábal al-Arus, para ser la capital del Califato, residencia real y sede del
gobierno. Dice la leyenda que fue su favorita
Zahra,
cuyo nombre significaba "La
Flor " quien le sugirió construir una hermosa ciudad
extramuros de Córdoba. De todo el hermosísimo complejo destaca el Palacio
de Zahra, y de éste sus dos grandes salones. El primero de
ellos, de forma rectangular, dividido en cinco naves y un gran patio porticado.
El segundo, conocido como el Salón Rico, se encuentra también dividido
en cinco naves precedidas de un pórtico. Las naves de los laterales se
convierten en estancias independientes del salón gracias a las puertas cuyas jambas llevan pilastras de
mármol blanco espléndidamente adornadas. Visitar esta ciudad te llevará
aproximadamente una hora, que estoy seguro que no se hará larga, pues sin duda
merece la pena pasear por lo que antaño fueron sus jardines, calles y palacios
de la época califal de Al-Andalus, llenos de lujo y de color, mientras te
pierdes entre sus calles laberínticas.
Una vez que vuelvas a montar en la
moto, vuelve sobre tus pasos, como si fueses de nuevo a Medina Azahara, pero al
llegar a la rotonda, toma la dirección de Sta. Mª de Trassierra, comenzando una
subida por la sierra muy amena y entretenida, rodeado de una vegetación que ya
te acompañará durante el resto del tiempo que rodemos por la sierra. Llegando a
la siguiente rotonda, donde se encuentra una gasolinera, gira a tu izquierda
para dirigirte hacia Sta. Mª de
Trassierra. Este tramo te hará disfrutar de tu moto: buen asfalto y un
trazado sinuoso entre una bonita arboleda que rodea la carretera. En el
trayecto encontrarás muchos establecimientos por si quieres parar a tomar un refrigerio. Al llegar a la
localidad encontrarás, frente a la imagen en piedra de la Virgen, un
establecimiento, donde comienza un sendero para poder visitar el entorno que
rodea los Baños de Popea, que son un tramo natural de pequeñas cascadas y saltos de agua alternados con pequeños remansos que sigue el curso del arroyo Molino. Es un entorno que merece la pena recorrer, y el camino no está demasiado mal para poder aparcar en una zona cercana.
Una vez que
vuelvas a la localidad, sigue la travesía para tomar una estrecha carretera que
se adentra en plena sierra y que te conducirá hasta la carretera que une
Posadas con Villaviciosa de Córdoba. Aunque la calzada es estrecha, el asfalto
es nuevo y se encuentra en buen estado; su trazado es muy sinuoso, con curvas
enlazadas que te obligan a cambiar el sentido de la trayectoria continuamente.
Tramos de fuertes bajadas, que se combinan con subidas vertiginosas y vistas
impresionantes que te anticipan el recorrido de la carretera por la que tendrás
que pasar. Apenas hay tráfico y si tienes suerte podrás encontrarte con algún
ciervo de los que pastan libremente por estos parajes naturales. A lo largo de
este recorrido encontrarás muchos lugares que te invitarán a hacer un alto en
el camino para hacer una foto o para disfrutar de la paz que emana de este
entorno, tan especial de Andalucía.
Al enlazar
con la carretera A-3075 (Villaviciosa de Córdoba-Posadas), giraremos a la
izquierda en dirección Posadas, adentrándonos
en el Parque Natural de la Sierra de Hornachuelos.
Hasta Posadas el esquema de la carretera es igual que el que he descrito poco
antes. Muchas curvas, mucha vegetación, subidas y bajadas y unas vistas
increíbles cuando los árboles te permiten ver más allá de los límites de la
calzada. Es un recorrido muy divertido que no dejará que te aburras ni un
momento, pero puede llegar a ser peligroso ya que hay muchas curvas ciegas, y
en épocas de caza, es muy frecuentada por aficionados a este deporte que van
con sus todoterrenos por medio de la vía, pudiendo darte un buen susto. Una vez
que llegues a Posadas, encontrarás al terminar esta carretera, las indicaciones
del área recreativa de la Sierrezuela, un lugar encantador para hacer una
parada en el camino antes de que cada cual, tome el camino de regreso a casa.
Nos vemos en
la carretera